Sube tus defensas con una mejor calidad de sueño
Dormir bien podría ser la estrategia más efectiva y más simple para protegernos del coronavirus. Además, está al alcance de todos.
Las estrategias que estamos utilizando para protegernos (como usar cubrebocas y lavarnos las manos) están enfocadas en evitar que el virus entre a nuestro cuerpo.
Pero tarde o temprano, la mayoría entraremos en contacto con el virus. Y cuando eso suceda, necesitamos que nuestro sistema inmunológico esté lo más fuerte posible. No queremos que esté envejecido, agotado ni sobreexcitado.
Para conseguirlo, el primer paso es tan sencillo que lo pasamos por alto: dormir bien. No solo significa dormir suficientes horas, también es importante cuidar los horarios y las condiciones en que duermes.
Los estudios muestran resultados consistentes:
Al recibir una vacuna, las personas con deficiencia de sueño tienen menor respuesta de anticuerpos.
Son más propensos a infecciones y tardan más tiempo en recuperarse.
Tienen 55% más riesgo de ser obesos.
Tienen mayor apetito y niveles más altos de glucosa e insulina.
Reportan 30% más ansiedad.
Tienen dificultad para aprender, concentrarse y tomar decisiones complejas.
Son más propensos a ser sedentarios y fumar o beber en exceso.
Suelen tener alteraciones en la microbiota y en el metabolismo.
¿Qué pasa con tu sistema inmunológico mientras duermes?
Durante el día, las defensas están protegiéndote activamente de cualquier amenaza y reparando tejidos. Pero esto no significa que durante la noche estén inactivas.
Mientras duermes:
Se ponen en marcha procesos más prolongados que nos permiten desarrollar inmunidad y memoria inmunológica de largo plazo.
El sistema inmune se entrena y se fortalece.
Se reparan células y tejidos esenciales para protegernos.
Aumenta la producción de células inmunes (como Natural Killer Cells y células T), gracias a que el cuerpo puede dedicar energía que durante el día está ocupada en otros procesos.
¿Cómo mejorar tu calidad de sueño?
Cambia tu cena por un caldo de huesos.
Si tu cuerpo está enfocado en digerir, tu sueño no será reparador. El caldo de huesos contiene aminoácidos y nutrientes que ayudan a producir los neurotransmisores necesarios para un sueño excelente.
En lugar de una cena pesada justo antes de dormir, tómate un caldo de huesos al menos 2 horas antes de acostarte. Es la estrategia más intensiva para fortalecer las defensas de toda la familia. Pide un paquete de caldos aquí.Asegúrate de no hacer que tu sistema inmunológico envejezca.
Nuestro cuerpo lleva miles de años en evolución de acuerdo a los ritmos del sol y funciona mejor cuando nos apegamos a ellos: actividad cuando hay luz, descanso cuando hay oscuridad. Cuando no respetamos estos horarios, estamos promoviendo que nuestro sistema inmune envejezca.
Por eso es esencial ir a dormir temprano, idealmente entre 10 y 10:30 pm. No hay forma de recuperar esas horas de regeneración y rejuvenecimiento inmunológico.
Además, es inteligente despertar con el sol, alrededor de las 6 am, pues es cuando se activan los procesos que estimulan la producción de energía en las mitocondrias.
Crea un ambiente protegido y regenerador.
Nuestro organismo funciona mejor cuando nuestro entorno se parece más al natural. Es ideal proteger a tu cuerpo de la contaminación electromagnética durante la noche, sacando cualquier aparato electrónico de tu habitación y apagando el internet.
Además, procura que la oscuridad sea total y evita las luces brillantes después de que el sol se oculta. Aunque estamos acostumbrados a dormir con toda esta interferencia, ¡nuestros cuerpos y nuestras defensas sí sienten los resultados!
No queremos un sistema inmune envejecido, débil o sin preparación.
Si quieres ayudar a que tu sistema inmunológico rejuvenezca y que esté más fuerte que nunca, pide un Reto de 20 días o un Tune Up de 3 días.
¡Es lo mejor que puedes hacer para protegerte!
