Nada más claro que escuchar directamente las experiencias de quienes ya han hecho un Tune Up:
“Me desinflamé, dormí excelente, no tuve nada de antojos. Simplemente WOW. En 3 o 5 días logras sentir un cambio impresionante.”
“Desde el primer día me siento ligera, sin hambre, con más energía y duermo profundo. Al término del programa los resultados son maravillosos, adiós inflamación y mi piel rejuvenece. Es verdaderamente un “reseteo” de cuerpo.”
“Después de 4 meses sigo sintiendo los resultados. Antes muchas comidas me caían pesado y ya no. Aprendí a comer mejor y tener hábitos más saludables. Creo que pocos productos ofrecen un beneficio tan a largo plazo. Me ayudó a regular y mejorar mucho mi digestión.”
En 3 o 5 días de Tune Up, nuestro cuerpo es capaz de cambiar.
La respuesta del organismo es veloz, y por eso hay personas que nos han dicho: “No puedo creer que se pueda lograr esto solo con comida.”
Y sí, es posible. La razón es que la comida es mucho más que nutrientes o calorías. La comida también le da información genética a nuestro cuerpo, le da instrucciones, le da materia prima y le da elementos de vida.
La Dra. Patricia Restrepo dice que un Tune Up es el equivalente a llevar tu auto al taller para un mantenimiento profundo: afinación, balanceo, limpieza, y reemplazo de los elementos que no estén funcionando de forma ideal.
Por eso, después de hacer un Tune Up, las personas se sienten renovadas: con más energía, ligeras, desinflamadas, con mente y digestión ágiles, y sin antojos. Muchas personas también reducen peso o medidas.
Es un programa breve (3 o 5 días), pero con resultados inmediatos que te ayudan a lucir y sentirte espectacular.
Así como afinas un auto, el Tune Up k.eat apoya los “motores” de tu cuerpo: tu metabolismo, tu sistema digestivo, tu microbiota, tu hígado y tu sistema hormonal.
Los alimentos orgánicos que te enviamos (desayuno, comida, cena y snacks) son como los mecánicos que limpian tu cuerpo desde el interior y activan los mecanismos de reparación. Estos alimentos están diseñados para ayudar a tu cuerpo a gestionar la carga tóxica que acumulamos día a día.
La Carga Tóxica en tu Organismo: ¿De dónde viene?
Tu cuerpo, una máquina increíble, enfrenta una carga tóxica constante. No solo hablamos de lo que comemos, sino de contaminantes ambientales, químicos en productos de limpieza y cuidado personal, e incluso el estrés crónico. Todas estas sustancias se acumulan.
Tu hígado, el gran desintoxicador, trabaja sin descanso para neutralizar y eliminar estas toxinas. Pero, cuando la exposición es muy alta o prolongada, se sobrecarga y agota. Esto ralentiza su función, permitiendo que las toxinas permanezcan más tiempo en el organismo, afectando tu energía, piel y bienestar general. Es como un filtro que necesita una limpieza profunda para seguir funcionando eficazmente.
Piensa en los pesticidas y herbicidas en alimentos no orgánicos, los aditivos y conservantes en ultraprocesados, o los metales pesados presentes en el agua y algunos pescados. Además, tu hogar puede ser una fuente: productos de limpieza con químicos agresivos, cosméticos y productos de cuidado personal con disruptores hormonales (como parabenos o ftalatos), y hasta los plásticos de envases y botellas que liberan sustancias al contacto con alimentos o calor. Todos estos elementos aumentan la presión sobre tu sistema. El Tune Up le da a tu sistema una pausa necesaria para procesar y eliminar estas toxinas.
Mientras tanto, tú disfrutas de los platillos, sopas y ensaladas orgánicos y gourmet que nuestro chef prepara para ti, y recibes acompañamiento para cambiar algunos hábitos clave de acuerdo al Método k.eat, que te ayudarán a obtener resultados en menos de una semana.
¿Cuándo es recomendable hacer un Tune Up?
Igual que con el auto…
Puedes hacer un Tune Up cuando sientes que algo anda mal y necesitas apoyo urgente: te sientes inflamado, cansado, con dolores, con apetito desmedido, con malestares… Estos son a menudo signos de que tu cuerpo está luchando con una carga tóxica excesiva o que tus sistemas están sobrecargados.
Y también puedes hacerlo cada 2 meses, antes de que sea urgente. Esta es la opción ideal porque así previenes que esos malestares aparezcan o crezcan.
Nuestro organismo también necesita mantenimiento profundo. Si no le damos oportunidad de limpiarse y repararse, nuestros sistemas van acumulando suciedad, inflamación y oxidación, que se convierten en síntomas y enfermedades. Una limpieza regular ayuda a tu cuerpo a manejar mejor la carga tóxica inevitable de la vida moderna.